Es un apellido amplio que resulta útil en amplias ocasiones.
Así, hablamos de medicina alternativa, alternativa económica, agricultura
alternativa, alternativa sindical, energía alternativa…. Tener una alternativa
es sinónimo de tabla de salvación en muchos escollos de la vida.
Es la tercera acepción la que interesa para este hilo. El diccionario
dice que alternativa es: “En actividades de cualquier género, especialmente
culturales, que difiere de los modelos oficialmente aceptados”.
El sentido marginal, subsidiario, accesorio de los modelos
alternativos nos hace subestimarlos y menospreciarlos en demasiadas ocasiones.
Sin embargo, es importante considerar que es muy probable que guardar semillas,
arar la tierra, sembrar cereales naciese como un movimiento alternativo en un
mundo de cazadores. Los sistemas participativos y democráticos nacieron como
esquemas de funcionamiento alternativos a los sistemas reinantes. El estudio
anatómico, como alternativa a los conjuros y hechizos.
Las ideas nacen y crecen como alternativas hasta que se
demuestra su bondad y beneficio. La dificultad pasa por sacar de la inercia del
pensamiento dominante a tantos que no se cuestionan si el esquema de
funcionamiento es el más idóneo, si las recetas aplicadas recurrentemente a los
mismos problemas son las más oportunas. El proceso de reflexión, investigación
e innovación que da lugar a una corriente alternativa es siempre digno de
elogio.
Llevar una vida que trate de usar el menor número de
recursos posibles, que aplique medidas de compensación, que persiga la armonía
con el entorno, ¿es un modelo de vida alternativa? En estos momentos si, porque
la masa sigue pensando que el modelo de hacinamiento urbano es la mejor
solución ya que es el que la mayoría quien lo hace suyo como mejor opción.
Vivir en el campo aspirando a la autosuficiente y tener un
alto grado de gobernanza propio es un modelo de vida alternativo. El asceta se
recluye en su mundo para encontrarse a si mismo. El Walden de Thoureu se fue al
campo movido por su enfado con la humanidad. El hippie agricultor lo hace por
convencimiento y sentido de la responsabilidad. El jubilado para encontrar paz
y tiempos acordes a su ritmo vital.
Los motivos y causas que pueden impulsarte
a llevar lo que hoy se considera una “vida alternativa” pueden ser muy
diversas, pero el error de la mayoría es mirar a esos movimientos e iniciativas
como excéntricos, residuales, inapropiados, inútiles o estériles porque, pueden
ser, en verdad, una ventana al futuro.
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